Monumental pelea en una boda

La boda de Karyssa Coleman y Ben Smethurst, una pareja inglesa, parece sacada de un guión de película. El escenario, una boda al aire libre en un jardín. Los protagonistas, los invitados, familiares y amigos. El inicio de la película, clásico. Una pareja que se casa y que decide unir sus vidas y las de sus familiares para siempre. El desenlace, trágico.

Pero antes de contar el desenlace mejor contar el desarrollo. Tras la celebración de la ceremonia clásica la pareja, como ocurre en todas las bodas, celebraba una comida con sus invitados. Los novios habían pensado en ofrecer un buffet para que todo el mundo pudiera servirse la cantidad de comida que deseara y parece que no fue buena idea.

La hermana de la novia, Krystel Coleman, de 29 años, se acercó como una más a coger algo de comida. Junto a ella el hermano del novio, Danny Smethurst. Un único trozo de pollo en la bandeja. Y allá va el desenlace. Krystel con los dos ojos morados y la nariz rota y una monumental pelea entre las dos familias.

Resulta que era el último trozo de pollo que quedaba y Danny quería cogerlo para su hijo. La pelea por la última pieza de pollo desencadenó en llamadas a la policía, visitas al hospital, la novia (embarazada de ocho meses) con un ataque de histeria y su madre peleando porque a una de sus hijas le habían dado una paliza.

Parece de película pero ha ocurrido en Norfolk, Inglaterra, en una boda que las dos familias nunca olvidarán.