La familia de José Contreras Balsera pide respuestas. Este joven de 33 años fallecía hace unos días después de estar tres meses en coma a consecuencia, según narra su familia, de una agresión sufrida el pasado mes de febrero en las inmediaciones del Museu Faller de Gandia. Los hechos se remontan al viernes 25 de febrero. Ese día, José Contreras salió de casa sobre las seis de la tarde, tras acompañar a su madre a comprar, “como solía hacer los fines de semana”, según señaló a Levante-EMV, Vicenta Balsera.

En ese momento la familia le pierde la pista hasta que, entre las seis y las siete de mañana del sábado, una mujer que sacaba a pasear a su perro le encontró inconsciente, gravemente herido “y con la cara totalmente desfigurada por la paliza”, según indica Mari, su hermana. El cuerpo estaba entre dos coches aparcados en la calle Vall d’Ebo, al lado mismo del Museu Faller, en el distrito de Benipeixcar.

Fue la mujer que halló el cuerpo la que avisó a la policía, que se personó en el lugar rápidamente e intentó reanimar al herido, sin éxito.

José fue trasladado por una ambulancia del SAMU primero al hospital de Gandia y después al de La Fe, en Valencia, donde ya ingresó en estado de coma. Allí ha permanecido ingresado durante tres meses sin que la labor de los médicos lograra que se despertara. Las lesiones sufridas durante la paliza le habían provocado secuelas irreversibles. Hace poco fue llevado al hospital sociosanitario de la Pedrera, en Dénia, donde fallecido el pasado 9 de junio.

Según la familia, al día siguiente de la agresión acudieron al domicilio agentes de la Policía Nacional que, en todo este tiempo, “no nos ha dicho nada sobre lo que le pasó a José esa noche”, señaló Susana, otra de las hermanas del fallecido.

Vía: Levante

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