Luisa Pastor tiene muy claro que el futuro de la provincia pasa por la recuperación económica y para ello es fundamental que sus sectores industriales tengan futuro y se reinvente. Por ello, la presidenta de la Diputación anunció ayer el compromiso de la institución para impulsar la creación de un ‘cluster’ empresarial relacionado con el sector del agua que convierta a las firmas que trabajan en este campo en referentes en España y a nivel internacional. Una actividad con «mucho futuro», según sus palabras, que puede ayudar a generar más empleo y diversificar el tejido económico.

 

El proyecto para parir este nuevo sector industrial, aún en fase embrionaria, cuenta con el respaldo de la Generalitat, tal como confirmó ayer el conseller de Economía, Comercio e Industria, Enrique Verdeguer, en su primera visita a la institución provincial. El primer reto es aunar a las empresas relacionadas para impulsar la investigación, la innovación y el desarrollo en temas hídricos.

 

Pastor adelantó que se están estudiando ya diversos proyectos hídricos de innovación para que las empresas del sector se puedan estructurar en un ‘cluster’. En su opinión, «la provincia es un laboratorio para el sector hídrico y esta iniciativa sería una forma de reactivar y hacer atractivas para las empresas la investigación y el desarrollo de los temas relacionados con el agua». Un planteamiento con el que coincide el conseller, para quien la Comunitat Valenciana y Alicante «en particular» es «un modelo integrador, en el cual hay todo tipo de empresas de ingeniería, de tratamiento, de depuración y de suministro, entre otras». Por ello, considera que podrían constituirse en un ‘cluster’, aunque no quiso avanzar más datos sobre ubicación.

 

Verdeguer asegura que es clave apostar por «otros sectores emergentes, muy intensivos en tecnología, con un efecto de arrastre en la economía», que además de utilizar «tecnologías propias, duraderas, limpias, sostenibles», tienen «implicaciones muy importantes para mejorar el día a día de los ciudadanos».

Y es que la puesta en marcha de medidas para lograr la reactivación de la industria, en general, fue una de las cuestiones que trataron en su reunión el titular de Economía y la presidenta de la Diputación.

 

El conseller, tras reconocer que el sector exportador alicantino ha perdido terreno frente al crecimiento de Valencia y Castellón, habló de un refuerzo de las políticas de internacionalización ya que, según subrayó, «son la base para la creación de empleo sostenible y de mayor calidad» y por tanto «uno de los objetivos de esta legislatura será aumentar la base exportadora e incrementar la tasa de apertura al exterior». Y puso como ejemplo la inversión del Consell de más de 120 millones de euros entre los años 2007 y 2010 en sectores como el textil, el juguete, el calzado, el mármol y la piedra natural.