Evolución del coche del futuro gracias a Internet y la tecnología M2M

Los avances en las telecomunicaciones están revolucionando el mundo y, del mismo modo, Internet y la tecnología M2M cambiará la idea actual del automovilismo en el futuro en base a los coches conectados que incluirán aplicaciones nuevas relacionadas con el ocio y la seguridad, algo que repercutirá en un aumento de la calidad y de la eficiencia de los vehículos.

Las ventajas que ofrecen este tipo de coches es que están impulsados por motores eléctricos y, a la vez, se alimentan de  combustible alternativo y no contaminante. La energía necesaria para su funcionamiento se puede suministrar con energía química, con supercondensadores o por energía cinética.

Según un estudio reciente llamado La industria del automóvil conectado 2013, en 2020 existirán 1.800 millones de conexiones m2m que aplicadas a los coches,  una nueva tecnología que hará que existan más de  700 millones de automóviles conectados  en los próximos 6 años y 1.100 millones de dispositivos post-venta para hacer posible la navegación.

Según Machina Research, firma que ha redactado el estudio, y las conclusiones de este informe que recoge las opiniones de ocho de los fabricantes más importantes de la industria del automóvil, en kla próxima década el 90 % de los coches vendrán con una plataforma de conectividad integrada. Hasta ahora, los coches conectados han comenzado a circular, pero lo han hecho conectados gracias a dispositivos post-venta.

La conectividad ya se ha convertido en un valor añadido en el sector del automóvil y las multinacionales lo saben. Por ello, han firmado acuerdos recientes, como el presentado por Teléfonica hace una semana. A partir de los próximos meses la teleco presidida por César Alierta dotará de Internet y tecnología M2M al modelo S en Europa de Tela, fabricante líder mundial en este tipo de vehículos. Gracias a esta novedad, el coche incluirá un sistema de navegación, música online, una conexión a internet y un sistema remoto que informe en tiempo real del estado del vehículo, tanto al usuario como a las autoridades, en caso de accidente.